Algo que Ver: Mamá

dijous, 26 de setembre del 2013


Título: Mamá [Mama]
Año: 2013
País: España, Canadá
Idioma: Inglés
Género: Terror, Drama
Duración: 100 min
Director: Andrés Muschietti
Escrita por: Neil Cross, Andrés Muschietti, Barbara Muschietti
Producción: J. Miles Dale, Barbara Muschietti 
Productor ejecutivo: Guillermo del Toro
Reparto: Jessica Chastain, Javier Botet, Nikolaj Coster-Waldau, Isabelle Nélisse, Maya y Sierra Dawe, Megan Charpentier, Morgan Mcgarry, Daniel Kash, Elva Mai Hoover, Jane Moffart, Hannah Cheesman, Julia Chantrey, Diane Gordon, Dominic Cuzzocrea, David Fox, Pamela Farrauto, Chrys Hobbs. Laura Guiteras, Melina Matthews y Jane Mofatt como la voz de Mamá.
Música: Fernando Velázquez
Fotografía: Antonio Riestra
Web oficial: http://www.mama-lapelicula.es/

Sinopsis: "Hace cinco años, el mismo día en que su madre fue asesinada, las pequeñas Victoria y Lilly desaparecieron en el bosque. Buscadas incansablemente por su tío Lucas (Nikolai Coster-Waldau) y su novia Annabel (Jessica Chastain), son encontradas unos años más tarde en una cabaña en medio de la naturaleza, donde han vivido aisladas de toda civilización. Comienzan entonces una nueva vida para las niñas de la mano de Lucas y Annabel, pero éstos pronto descubren que alguien o algo misterioso las sigue arropando por las noches."

Algo que decir:
Primera película del director, guionista y productor argentino Andrés Muschietti, basada en su cortometraje homónimo realizado en 2008.



Para lo que te venden por ahí como películas "de terror", y con el pequeño margen de condescendencia que merece Muschietti por el hecho que ésta haya sido su primera película enteramente a su cargo, diré que no está mal del todo. La historia original, aunque no del todo original, estaba bien pensada: dos niñas que quedan aisladas en una cabaña en medio del bosque, y son acogidas por un espíritu maligno; nada mal, pero podría haber dado mucho más de sí. Partiendo de una buena base, la trama se desenvuelve de forma excesivamente lenta, haciendo no sólo uso sino más bien abuso de las escenas oscuras en que no se ve un pimiento (en general, no entiendo esa asociación de conceptos entre cine de terror y oscuridad... yo valoro el que se vea algo en la pantalla eh?), y arrojándose a un final no sólo predecible sino también un poco descafeinado.

Para mí, lo único que realmente daba miedo de ésta película eran las niñas (sobretodo Lilly, sí), parte gracias a una buena caracterización y parte porque, bueno, los niños acostumbran a acojonar bastante cuando intervienen en películas del estilo, se trata de la asociación de conceptos misma de terror e infancia creo yo.
Por otro lado, lo más decepcionante de la película: Mamá. Cae en el cliché habitual del fantasma humanoide-monstruoso necesitado de un buen bocata de chorizo, consigue algún sobresalto cuando te la sacan por "sorpresa" en una de las demasiado habituales escenas de negrura (no oscuridad eh?, ojo), pero si se mira con demasiado detenimiento lo más que da es vergüenza ajena.
Se echa en falta, además, algo más de información para rellenar los huecos que dejan coja a la trama, que en ocasiones anda algo falta de coherencia.

No la considero una película especialmente terrible pero tampoco demasiado recomendable, la verdad, y eso que pensaba que me gustaría, pero... simplemente hay muchas películas del género más o menos parecidas y mejor resueltas que ésta.  

Para hacer boca:

Algo que Leer: Un Saco de Canicas

dimarts, 24 de setembre del 2013


Título: Un Saco de Canicas [Un Sac de Billes]
Autor: Joseph Joffo
Idioma original: Francés
País: Francia
Editorial: Grijalbo Mondadori, S.A. Colección Mitos de Bolsillo
Primera Edición: 1973
Traducción: Lluís Maria Todó
Número de páginas: 290 pág
Género: Novela Histórica, Drama, Autobiografía
ISBN: 9788439703044

Sinopsis:
"El peluquero Joffo, un honrado judío establecido en el París ocupado por los nazis, decide dispersar a su familia para evitar el cruel y previsible destino que les espera. Sus hijos Joseph (el autor de esta obra) y Maurice tienen, a sus diez y doce años, que sobrevivir solos en un universo desquiciado, en el que la barbarie, la amistad, la picaresca y, sobre todo, el miedo imponen una sola ley: la supervivencia."

Algo que decir:
Otra publicación más recogiendo el testimonio de (en este caso, y por fortuna) un superviviente al holocausto, porque creo que nunca serán suficientes para ilustrar la barbarie y todo el mundo debería ser consciente de ello.

Nacido en 1930, Joseph Joffo tenía sólo 10 años cuando su padre les empujó a su hermano Maurice y a él a la oscuridad de la noche con 5000 francos y la orden de abandonar un París que había dejado de ser amable para los judíos. El pequeño Joseph, aún sin comprender exactamente el significado de la palabra judío, comprendió enseguida que a coste de su propia vida debía renegar de ello mientras comenzaba junto a su hermano el largo viaje hacia el lejano Menton, en la costa Mediterránea, donde los esperaban sus hermanos Henri y Albert. Ambos vivieron todo tipo de situaciones a partir de ese momento, constantemente perseguidos por el inexorable azote de la guerra que les pisaba los talones en una huida enloquecida que marcaría para siempre sus vidas.

Para hacer boca (fragmento extraído de una página al azar):
"…
Seis días.
Seis días hace ya que nos tienen detenidos y no nos sueltan. Hubo otro interrogatorio la mañana del tercer día y otro la tarde del cuarto. Y desde hace dos días, nada. Maurice ha preguntado al intérprete cuando nos cruzamos con él en un pasillo. Parece que están tramitando nuestro expediente, y que los alemanes esperan algún hecho más decisivo para clasificarlo de forma definitiva: es decir, para liberarnos o deportarnos.
Todos los servicios están sobrecargados de trabajo. Hay un movimiento incesante en el vestíbulo, en los dos salones y en los pasillos de los pisos. Las escaleras están siempre atestadas de S.S. de paisano y de militar. Están los servicios de identidad, los de verificación, los de entrega de Ausweiss, de control de domicilios. Día tras día, en los pasillos se encontraban las mismas caras, la misma palidez, las mismas arrugas de cansancio y de miedo; en el descansillo del segundo piso hay un hombre que lleva tres días esperando de pie, viene a primera hora y se marcha al caer la noche. ¿Quién es? ¿Qué quiere? ¿Qué documento viene en vano a buscar? Todo me parece absolutamente incomprensible, sobretodo este contraste entre los ladridos de los cabos de las S.S. que empujan al rebaño por las escaleras (por sus gestos y sus voces noto que les gustaría pegar y matar) y por otra parte esas investigaciones meticulosas, esa selva de tampones manejados con mezquindad, las huellas, las firmas, una meticulosidad que me fascina. ¿Cómo pueden ser a un tiempo asesinos y chupatintas quisquillosos y aplicados?
..."

Algo que Hacer: Exhibiciones de sumo en el XIX Salón del Manga de Barcelona

diumenge, 22 de setembre del 2013


DOS LUCHADORES DE SUMO JAPONESES REALIZARÁN EXHIBICIONES EN EL XIX SALÓN DEL MANGA DE BARCELONA

El Salón del Manga de Barcelona acogerá diversas exhibiciones de sumo con la participación de dos luchadores y un instructor, gracias a la iniciativa de Fundación Japón que cuenta con colaboración de la Federación Japonesa de Sumo. Esta edición del Salón tiene uno de sus ejes en la presencia del deporte en el manga, que también servirá para conocer las disciplinas tradicionales japonesas.

El sumo es una ceremonia religiosa transmitida desde la antigüedad en la que, como en otras artes marciales, el objetivo no sólo consiste en vencer. Es más importante la autodisciplina y el entrenamiento de las habilidades, tanto del cuerpo como del espíritu. Dos luchadores o rikishi se enfrentan en un área circular. El primero en tocar el suelo con una parte de su cuerpo que no sean los pies o salga del mencionado círculo queda eliminado. También queda fuera quien pierde el mawashi, la vestimenta que utilizan los luchadores. El reglamento también establece toda una serie de golpes ilegales que provocan la eliminación del luchador que los ejecute.

Los luchadores de sumo que vendrán desde Japón son Kôtarô Mieda y Shinya Miyashita, mientras que el instructor es Kazuo Kurazono, antiguo campeón en diversos competiciones y miembro permanente de la Federación Internacional de Sumo entre otros destacados cargos. Kôtaro Mieda (1986) tiene una brillante trayectoria como luchador federado, con diversos premios en su haber. Mide 1,76 m y pesa 150 kg. Por su parte,  Shinya Miyashita (1988), también premiado en diversos campeonatos, mide 1,74 m y pesa 170 kg. Se da la circunstancia de que ambos luchadores participarán el Festival Nacional de Deporte de Japón, que es la mayor celebración deportiva del país que se celebra el segundo lunes de octubre.

El XIX SALÓN DEL MANGA DE BARCELONA se celebrará del jueves 31 de octubre al domingo 3 de noviembre de 2013 en los palacios 1 y 2 de Fira de Barcelona en Montjuïc. En el Palacio 2 se encontrarán a los expositores, talleres de manga y cocina japonesa, exposiciones, macro-espacios de videojuegos, sala de actos, exposiciones, área de restauración japonesa y otras actividades. El Palacio 1 albergará el escenario donde tendrán lugar los concursos de cosplay y karaoke, además de actuaciones musicales y exhibiciones de populares bailes asiáticos.

Algo que ver: Caperucita Roja, ¿a quién tienes miedo?

divendres, 20 de setembre del 2013


Título: Caperucita Roja, ¿a quién tienes miedo? [Red Riding Hood]
Año: 2011
País: EUA
Idioma: Inglés
Género: Fantasía, Terror, Misterio, Romance
Duración: 100 min
Director: Catherine Hardwick
Escrita por: David Leslie Johnson
Producción: Leonardo DiCaprio, Jennifer Davisson Killoran, Julie Yorn
Reparto: Amanda Seyfried, Shiloh Fernandez, Virginia Madsen, Billy Burke, Julie Christie, Alexandria Maillot, Gary Oldman, Bella King, Darren SHahlavi, Adrian Holomes, Lauro Chartrand, Matt Ward, Paul Wu, Michael Shanks, Max Irons, Christine Willes, Shauna Kain, Carmen Lavigne, Kacey Rohl, Jen Halley, Cole Heppel, Michael Hogan, Lucas Haas 
Música: Brian Retzell
Fotografía: Mandy Walker
Web oficial: http://redridinghood.warnerbros.com/

Sinopsis: "Valerie (Amanda Seyfried) es una hermosa joven enamorada de un extranjero inquietante, Peter (Shiloh Fernández), pero sus padres han arreglado su matrimonio con el adinerado Henry (Max Irons). No dispuestos a separarse, Valerie y Peter planean huir juntos cuando se enteran que la hermana mayor de ella ha sido asesinada por el Lobo que merodea por los bosques oscuros de la aldea. Por años, los aldeanos han mantenido una tregua con la bestia, ofreciéndole sacrificios animales cada mes. Pero ahora la criatura ha subido su apuesta, una vida humana. Deseosa de venganza, la aldea llama al famoso cazador de hombres lobo, el Padre Solomon (Gary Oldman), para que elimine a la bestia, aunque su llegada trae consecuencias no deseadas cuando advierte que la criatura toma forma humana cuando llega el día, pudiendo ser cualquiera de ellos. Pronto Valerie comienza a presagiar que uno de los que la rodean es el monstruo. Y también descubre que tiene una única conexión con la bestia, que inexorablemente les une, haciendo de ella una sospechosa y a la vez un cebo."

Algo que decir:
Ésta película me llamó mucho la atención cuando salió, parte porque me gusta el tipo de estética que adoptaron con ella y parte porque Caperucita Roja es, si no mi predilecto, uno de mis cuentos favoritos de toda la vida. Éste último fue también el principal motivo de que no me decidiera a verla en su día, al notar que la directora era la misma que en la primera entrega de la saga Crepúsculo, adaptación que no me gustó demasiado, por ser finos.
Pero pasa aquello, que con el tiempo das con la película en cuestión en una tarde especialmente improductiva y aburrida de tu vida y piensas, ¿por qué no? ...y ocurre lo inevitable.

Para ser francos, la película no es tan horrible como yo esperaba: visualmente es más que aceptable, agradable de ver, aunque en las escenas de acción cae en el más que habitual revoltijo de cuerpos en movimiento en escenas oscuras de más que consiguen poco más que marear al espectador y que éste no sepa quién es quién... algo muy conveniente, en una película cuyo único aliciente es que no se sabe quién es el monstruo hasta el final mismo de la trama, dirigiendo la atención del espectador una y otra vez de aquí para allá para mantener la tensión a lo largo de una película a la que le sobra metraje para lo poco que tiene que contar, conduciéndole a un desenlace que después de tanto mareo no consigue conjurar una verdadera sorpresa, y a título personal me dejó bastante fría.
Me pareció una película adecuada para pasar un rato si no se te ocurre algo mejor que ver o hacer, pero creo que no voy a molestarme en recomendarla: sólo merece la pena por lo bonita que es Amanda Seyfried y lo bien que le sienta el rojo en todas esas copiosas tomas sobre blanco (tan gratuitas, con su capa que ahora mide un metro, ahora mide diez).

Para hacer boca: